La reducción de la jornada laboral que se ha aprobado hoy en el Consejo de Ministros, produce un serio impacto en las empresas, al suponer una nueva subida de los costes laborales, que se suma a la del SMI y las cotizaciones sociales. Esta medida penaliza especialmente a las microempresas, que constituyen el 94% de las empresas de hostelería, al contar con menos de 10 trabajadores.
El salario supone de media el 31% de la facturación anual de las empresas, y en el periodo entre el primer trimestre y el tercer trimestre de 2024 experimentó un incremento de más del 14,5%, suponiendo un importante esfuerzo para las empresas, situándose, de media, el coste laboral por trabajador en el mismo periodo en 22.848€.
La reducción de la jornada de un 6% en un sector con más de 1,8 millones de trabajadores de media en 2024 supone un impacto salarial directo de 2.538 millones de € en el conjunto de las más de 300.000 empresas que conforman el sector. En el caso concreto de la hostelería, donde la productividad está vinculada a la presencialidad la reducción del tiempo de servicio y producción en los locales supone una reducción de un 3% de la facturación, cifrada en 5.099 millones de € anuales.
Además desde Hostelería de España y la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) denuncian el sinsentido de cómo dar solución a aspectos organizativos insalvables en empresas del sector, como aquellas que ofrecen un servicio a los clientes de 24 horas , cubiertos en tres turnos, que en estas nuevas circunstancias dejarían franjas horarias descubiertas.
Para Emilio Gallego, secretario general de Hostelería de España, la aprobación por parte del Consejo de ministros de esta medida “vulnera el buen funcionamiento del diálogo social y de los convenios colectivos” al tiempo que remarca que “no se tiene en cuenta el factor de la productividad a la hora de plantear la medida, lo que puede tener efectos muy negativos para la economía nacional”.
Para Jorge Marichal, presidente de CEHAT, “el sector turístico está muy afectado por la estacionalidad y requiere una flexibilidad que ha sido siempre acordada con los sindicatos. España es un ejemplo de concordia social en esta materia, fruto del trabajo realizado por patronal y sindicatos. Cualquier intromisión que dañe el diálogo social tendrá consecuencias muy negativas para el empleo y para mantener la competitividad turística española y, con ello, la del conjunto de su economía, ya que no podemos olvidar el gran peso que ha alcanzado el sector turístico en la recuperación postpandemia y el que seguirá acumulando en los próximos años”.
CEHAT y Hostelería de España forman parte, junto con las organizaciones sindicales, de la comisión negociadora del Acuerdo laboral Estatal de Hostelería- ALEH- desde su fundación el 20 de febrero de 1995. Un convenio estatal, que permite garantizar unas condiciones de mercado laboral único para el sector hostelero en todo el país, y que se ha convertido en todos estos años en un instrumento fundamental para dotar de estabilidad al sector