El sector de la hostelería es el único entre los grandes sectores de la economía de nuestro país dónde las más mujeres superan en número a los hombres. De los 1,85 millones de trabajadores empleados en hostelería en 2024, el 54,7% son mujeres, superando el millón de trabajadoras. De ellas 746.400 trabajan en bares y restaurantes, y 265.800 en alojamiento.
El predominio femenino en el empleo es más acusado en la rama de alojamiento, donde las mujeres representan el 57,1%, mientras que en restauración existe una mayor paridad de género con un 53,8% de trabajadoras. En el último año el empleo femenino ha crecido con mayor intensidad que el masculino, un 8,6% en restauración y un 7,7% en el alojamiento, frente a los aumentos más moderados del 3,8% y 3,3%, en el empleo masculino, respectivamente.
Comparando con el período precrisis, el comportamiento varía según la rama de actividad. En restauración, la proporción de mujeres ha aumentado, pasando del 51,9% en 2019 al 53,8% en 2024; mientras que en el alojamiento ha disminuido, pasando del 59,3% al 56,1%.
Del total del empleo femenino en hostelería el 13,7% de las mujeres trabaja por cuenta propia, que suponen 138.600. En restauración las trabajadoras autónomas tienen una mayor participación, alcanzando el 16,9%, mientras que en el alojamiento representan solo el 4,7%. En el último año la proporción de mujeres autónomas se ha mantenido estable en un 43,8%. Sin embargo, por ramas de actividad, en restauración ha aumentado ligeramente hasta el 43,5% (frente al 43,2% en 2023), mientras que en alojamiento han perdido peso, bajando al 47,9%, frente al 51% del año anterior.
El empleo a tiempo parcial está especialmente concentrado en las mujeres dentro del sector hostelero. Con 285.500 trabajadoras a tiempo parcial, representan el 66,1% del total de empleadas. Dentro del total de cada género, el trabajo a tiempo parcial supone el 28,2% del total en el empleo femenino, frente al 17,4% en el caso del empleo masculino.
En cuanto a distribución por edad, las mujeres predominan en casi todos los tramos de edad, con una mayor distancia con los hombres en la franja de entre 30 y 59 años. En el resto prácticamente se mantienen equiparados.